A pesar de elaborarse de forma tradicional con la sangre del cerdo y con la cebolla picada existen versiones que incluyen miga de pan para dar más consistencia y grasa de cerdo, con ajo y pimentón e incluso piñones. Suelen estar embutidas en tripa de cerdo natural, su longitud oscila entre los 20 cm y los 30 cm. Es fácil encontrar en cualquier charcutería del territorio español. Se suelen conservar en sitios frescos, lo mejor es consumirlas cuanto antes ya que se suelen adquirir un sabor ácido cuando pasa el tiempo.
Modo de preparación
Se suele preparar cocida en agua durante un periodo de tiempo de unos diez minutos y su contenido pastoso se sirve en una cazuela de barro como aperitivo o tapa (Barrio Húmedo de León). Es frecuente también verla frita a la sartén o a la plancha.